La receta de la abuela
¿Cuántas veces en las visitas a los abuelos, nos gustó mucho un platillo? Pues es inevitable pedirle la receta a quien la hizo y si esa persona no le preocupa compartirlas, entonces buscarás una hoja donde anotar, repentinamente recuerdas que guardaste tu recetario para emergencias en tu bolso, corres por el, entonces cuando tengas tiempo y antojo prepararas con mucho deseo ese platillo, tampoco te confíes, porque aunque tengas la receta de la mejor chef, debes incluir hacerlo con mucho cariño y paciencia para poder desarrollar tu sazón. Que si le falta mas cebolla o sal, que pica mucho o que no pica nada, cada sazón se va formando de acuerdo con tu buen gusto apoyado de probaditas a quien mas confianza le tienes, o te tiene. Lo que importa es que la práctica hace al maestro, que mejor que te puedas apoyar de los tips que encuentras en la red o entre las críticas de tus comensales. Lo que necesitas será un Hilacho para poder explayarte en el procedimiento, consejos, dibujos,...